Quisiera ser la palabra justa para aliviar tu dolor, ese pañuelo de lágrimas, ese hombro, esa mano, esa caricia, la mirada justa, tu aliento y tus ganas de salir adelante. Y aunque no reconozco tu dolor y no alcanzo a comprender qué es lo que sucede, entiendo que hay tiempo y mil cosas por contar, por eso respeto tu silencio y tus ganas de cerrar los ojos frente a las constantes preguntas de los demás.
Quiero que sepas que somos uno solo bajo la sombra y no importa que tan fuerte sea la penumbra, estoy contigo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario